Con el objeto de atender el conflicto social que por causas de disputas agrarias y de aprovechamiento forestal sostienen comunidades chiapanecas y oaxaqueñas en la zona de los Chimalapas, ubicada en los límites de ambas entidades federativas, el día de hoy se reunieron los gobernadores Juan Sabines Guerrero y Gabino Cué Monteagudo con el Secretario de Gobernación José Francisco Blake Mora.
Al encuentro también asistieron el Secretario de la Reforma Agraria Abelardo Escobar Prieto, el Subsecretario de Gobierno de la Secretaría de Gobernación Juan Marcos Gutiérrez González, el Subsecretario de Gestión para la Protección Ambiental de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Mauricio Limón Aguirre, así como los Secretarios de Gobierno de Chiapas, Noé Castañón León y de Oaxaca, Jesús Martínez Álvarez, apoyados por diversos funcionarios con injerencia en la problemática que presenta dicha región.
Los gobiernos estatales y el Gobierno Federal acordaron intensificar los trabajos de diálogo y técnicos para lograr tanto la distensión como la solución de fondo al conflicto, la cual deberá ser a través de esquemas de conciliación, pero con pleno respeto al estado de derecho y a la integridad y los derechos humanos de las personas.
Las partes acordaron implementar las acciones necesarias para la reconversión de las actividades forestales hasta hoy autorizadas al Ejido Díaz Ordaz y a un par de congregaciones de la comunidad de San Miguel Chimalapa, de tal manera que se les compense de forma suficiente y razonable, pero que no sea obstáculo para la solución del conflicto agrario y que al final permita el desarrollo sustentable e integral de la zona, propiciando la cultura de los servicios ambientales.
Al efecto, los gobernadores y el titular de la política interior se comprometieron a incrementar los esfuerzos gubernamentales en materia de gasto social e infraestructura para acelerar la mejora en las condiciones de vida de la población en toda la zona.
Los gobiernos estatales de Chiapas y Oaxaca y el Gobierno Federal, reafirmaron su compromiso para garantizar el orden y el imperio de la Ley, al tiempo que hicieron un llamado a los ejidatarios y comuneros de la zona para avenirse a través del diálogo y el respeto.