jueves, 3 de diciembre de 2009

Inaugura Juan Sabines templo adventista en Nuevo Juan del Grijalva


En Nuevo Juan del Grijalva, y en todo Chiapas, la fe convoca y une, afirmó el gobernador de Chiapas, Juan Sabines Guerrero, al asistir a la inauguración del nuevo templo Adventista, que fue construida para que esta comunidad evangélica, recobrara –tras la tragedia del 4 de noviembre del 2007- un espacio digno para el encuentro y la fe. A este emotivo acto religioso asistieron líderes de la Iglesia Adventista nacional, entre ellos, Dimas López López, presidente de la Asociación Norte de Chiapas, y David Javier Pérez, presidente de la Unión del Sur, Anastasio Ramírez Ramírez, por el Distrito de Juárez, y como una muestra de la unidad y respeto que se respira en esta nueva comunidad, también estuvo presente el párroco de la iglesia Católica, Miguel Ángel Jiménez. El mandatario chiapaneco para subrayó aquí, en medio de la comunidad adventista, que desde que se proyectó esta obra, siempre tuvo mucho interés de entrar a este espacio digno para el encuentro, que como hoy, también con la presencia del líder católico local, se demuestra que la fe no es motivo de pleito, sino significa que en el respeto a esa fe de cada quien, hay armonía y una sana convivencia. “El gobierno debe ser garante de eso, no imponer, sino resolver. Por eso estamos aquí, y para eso nos puso el pueblo, para esa misión”, sostuvo Sabines Guerrero, quien acompañado de su esposa, Isabel Aguilera de Sabines, llegó a Nuevo Juan del Grijalva. Sabines inauguró el templo adventista, al igual que lo hizo con el tempo católico el pasado 16 de de noviembre. Entre evangélicos y católicos, en esta ciudad sustentable, gravita una evidente hermandad, tras de que las 410 familias que vinieron a vivir aquí, sufrieron en noviembre del 2007, una de las peores tragedias a consecuencia del tapón del Grijalva. Reiteró que el gobierno reconoce, sabe y defiende la fe de su pueblo. “La fe es patrimonio del pueblo libre, y si no hay libertad para la fe, entonces no hay actos de fe, por eso el gobierno debe ser garante de la libertad de culto y que esa fe se dé en armonía y en paz, como en Nuevo Juan del Grijalva”, dijo. Al agradecer al gobernador Sabines y su esposa, todo lo que hicieron para que la semilla de Betel, templo que desapareció en el incidente, el pastor Anastasio Ramírez Ramírez recordó que a raíz de la tragedia, que dañó a otros cuatro templos de la zona, y como “cáscara de nuez” sepultó a muchos de sus hermanos, la comunidad adventista se quedó un par de años “desprovista de un lugar para adorar a Dios y fortalecer la vida y enfrentarla con sus retos”. “El 4 de noviembre del 2007, un incidente triste nos arrebató lo que con tanto amor y sacrificio habíamos construido para adorar a nuestro Dios”, lamentó, al decir que este nuevo templo, no lo habían imaginado. “Hoy estamos aquí para disfrutar uno de los favores que nos ha concedido, motivo de gran alegría por haber convertido nuestro sueño roto en un sueño palpable, hermoso y confortable” dijo al gobernador. Y agradeció: “gracias sin duda a quienes hicieron su mejor esfuerzo para plantar la huella de Bethel en este hermoso santuario”. Hizo ver que la iniciativa del gobierno, les dio la fuerza para creer que era posible lograr lo que se sueña, si se tiene la paciencia necesaria. Compartió, a nombre de sus compañeros pastores y adventistas en general, la alegría y satisfacción de contar con este nuevo templo, tras de haber perdido todo en Juan del Grijalva, donde con saña inaudita, la naturaleza les arrebató todo, vidas humanas y el templo. El 19 de marzo, según la minuta del gobierno del estado, se aprobó el proyecto. Se destinaron 22 lotes de 10 por 30 y una nave de 11 por 21 metros cuadrados, además de la donación de 500 sillas. Por ello, hicieron un sincero agradecimiento por todo este apoyo, y la gestión incondicional que tuvieron de parte del subsecretario de Asuntos Religiosos, profesor Enrique Ramírez Coronado, que a nombre del gobernador, contribuyó para que este sueño se hiciera realidad. Momentos antes de despedirse, el gobernador Sabines Guerrero, manifestó: “Que sea este espacio digno de encuentro de paz, de fe, pero sobre todo, de mucha oración por Chiapas”.